Entrevista a José Luis Alperi en La Nueva España

Nuestro Secretario General responde sobre los proyectos, en el marco de una transición justa, que se pueden implantar en las comarcas mineras.

A continuación puedes leer la entrevista al completo.

De todos los proyectos que han propuesto en los últimos meses, ¿cuál es el que consideran más viable, ahora, para ser el primero en desarrollar?

Uno es ya un hecho, HUNOSA medio propio de la Administración. Ahora queda implementar con celeridad su consolidación y puesta en marcha.

El otro más inmediato, sería el desarrollo de uno de los almacenes estratégicos de material sanitario y medicamentos que hay previsto construir en España, donde HUNOSA dispone de terrenos y edificios que pueden utilizarse como base de una de esas reservas y además cuenta con estructuras subterráneas que pueden ser adaptadas como almacenes de alta seguridad.

Teruel también puja por el aspecto sanitario y farmacéutico, ¿puede ser un problema para Asturias y las comarcas mineras?

El hecho de salir los primeros hace que hayamos recorrido un periplo importante de cara a posicionarnos como principales candidatos, puesto que ya se ha enviado, a los Ministerios correspondientes, el estudio para que el Pozo Santiago albergue Almacén Estratégico de Material Sanitario.

Por otra parte, Asturias cuenta con un sector químico muy solvente y reconocido internacionalmente. Si a eso añadimos todas las actividades de investigación y la colaboración público-privada vinculadas al sector biosanitario, tendremos el binomio completo

¿Considera positivo el respaldo del Gobierno regional?

Sin duda. Que el presidente de Asturias haya salido públicamente a respaldarlo es muy importante y muy positivo.

¿En qué gestiones se traduce?

Me consta que ha hablado personalmente con los Ministerios para agilizar el proyecto, y que se implante en Asturias

Es Barbón persona de las Cuencas, alguien sensible a sus problemas o ya, como presidente, ¿mantiene una mayor distancia?

Adrián Barbón ha demostrado ser un presidente cercano y sensible a todas las problemáticas sectoriales y territoriales asturianas, sin distinciones ni favoritismos, porque sabe que actuar de manera localista es un tremendo error.

 

¿Cómo deben estar presentes las Cuencas en la comisión de reconstrucción regional?

Tengo que decir que las CC.MM. han sido quienes han aportado, solidaria y territorialmente, la primera herramienta de reconstrucción: Los Convenios de Transición Justa, que están recogidos en el Acuerdo para una Transición Justa de la Minería del Carbón, y Desarrollo Sostenible de las Comarcas Mineras 2019-2027.

Como decía, tres Convenios de Transición Justa ya firmados para las comarcas afectadas por el cierre de las minas con el objetivo de crear y fijar en empleo a medio y largo plazo, donde vamos a ser muy exigentes para que se respeten los principios de adicionalidad y complementariedad con Suroccidente, Nalón y Caudal. Quienes viven y trabajan en estos municipios tienen los mismos derechos a una reconstrucción que el resto del territorio asturiano y, a mayores, a que se atienda la reconversión sufrida.

¿Encuentran receptivo al Gobierno de Pedro Sánchez con sus propuestas para las comarcas mineras?

Es cierto que, en este momento, lo más importante es estabilizar y controlar la situación sanitaria, junto con las necesidades más urgentes, y en eso está centrado el Gobierno.

No obstante, hay que decir que no solo no se han parado los procesos participativos, como los mencionados Convenios de Transición Justa, sino que han puesto en marcha otros muy importantes, como los relacionados con el almacenamiento energético, o con la aprobación de 27 millones de euros para financiar proyectos empresariales y pequeños proyectos de inversión generadores de empleo.

Un pozo de Big Data suena a ciencia ficción, ¿lo ve posible?

Una cuestión es cómo pueda sonar, y otra bien distinta constatar que es una realidad en Noruega, donde ya hay en funcionamiento un centro de procesamiento de datos en una mina subterránea.

Pero, a mayor abundamiento, tenemos que decir que existe la necesidad, se están construyendo data centers, e invirtiendo en estas infraestructuras, empresas del sector ya se han puesto en contacto con nosotros para trasladarnos su interés, así que entendemos que es un proyecto totalmente factible y realizable; por lo que ahora necesitamos que se dé el siguiente paso y se haga un estudio preliminar para situarlo.

¿Llegaremos a acoger un centro nacional de rescates, tal y como han propuesto?

Esa es nuestra intención, y esa es nuestra propuesta. ¿Por qué en Asturias no se pueden materializar estos proyectos? La situación tiene que hacer que nos reinventemos, en pleno período de transición energética debemos dirigirnos a otros negocios, sin olvidar nuestro bagaje minero y aprovechando el conocimiento adquirido.

Hay una oportunidad con los fondos de transición justa, y debemos utilizarla para generar empleo, como hacen otros muchos colectivos, para actividades muy diversas.

¿Cómo debe ser la HUNOSA del futuro?

El plan que se ha diseñado para HUNOSA es conseguir la transición desde la actual actividad de la Empresa, basada en la minería del carbón, hacia una Empresa centrada en la energía, los servicios energéticos y la restauración medioambiental, que asegure su viabilidad a largo plazo de forma estable.

¿Le perjudicará la ley de cambio climático o será una oportunidad para la empresa?

Será una oportunidad. Sin duda. Con la Ley de cambio Climático, se abren nuevas oportunidades al sector energético, y está en la mano de HUNOSA y de SEPI aprovecharlas.

En un país que la propiedad pública apenas genera el 5% de la energía eléctrica, desde el SOMA-FITAG-UGT reivindicamos la necesidad de una empresa pública energética que ayude a contener los excesos del mercado, y apostamos por HUNOSA para ello.

¿No tiene la sensación de que los proyectos de la compañía estatal se desarrollan de forma lenta?

En la última comisión de seguimiento del Plan de Empresa manifestamos que HUNOSA y SEPI deben pasar ya de las palabras a los hechos, y asumir su papel de transformarse en la vanguardia de la transición energética en Asturias como ha dicho, en su día, el actual presidente del Gobierno.

Hay actuaciones que son urgentes, como el desarrollo del Grupo HUNOSA como medio propio de la Administración para la restauración medioambiental, porque de ello dependen muchos empleos.

¿Cómo valora el trabajo desarrollado por HUNOSA para su transformación?

Nos consta que están trabajando con empeño para ello y desde nuestra posición sindical estamos colaborando y exigiendo lo trazado en el Plan de Empresa. La valoración de esta primera Fase, que finaliza a mediados del año 2021, la haremos en ese momento.

La biomasa, la geotermia y ahora el hidrógeno como una oportunidad, ese es el modelo que preveían para HUNOSA, ¿Una empresa energética?

Sería parte de esa HUNOSA Energética de la que hablamos. El hidrógeno se encuentra en una fase incipiente. La geotermia con una larga trayectoria, periodo 2006-2012, es una tecnología limpia, pero tiene una clara debilidad: genera poco empleo. Y la biomasa, después del fracaso de la anterior dirección con SEPI para implantar una central de 15 megavatios en Reicastro, pasa por la hibridación de la Pereda, pero tampoco sería una actividad intensiva en la generación de empleo.

Ninguna actividad se puede desdeñar, todas encajarían dentro de ese modelo de empresa que acordamos, pero son insuficientes. Aspiramos a una empresa energética con mayúsculas.

¿Y qué pasa con el carbón?

“HUNOSA, a fin de garantizar un suministro estable de combustible a la Térmica de La Pereda, continuará, mientras la legislación lo permita, la extracción, en el Pozo San Nicolás, de combustible con destino a la Central”. Así está recogido en el Plan de Empresa, y así vamos a exigir que sea.

Fondos verdes, fondos mineros pendientes de transición justa, ¿cómo se explica este embrollo? ¿Hemos aprendido de los errores del pasado?

Tengo que reconocer que hay un ligero retraso en la implementación de los fondos mineros, debido principalmente a que, durante el periodo 2013-2018, en las CCMM, y con un Gobierno del PP en el país, no se firmó ni un solo proyecto ni se recibió ni un solo euro de los 250 millones acordados en el plan de la minería correspondiente, y ahora está costando recuperar ese tiempo perdido.

No obstante, la experiencia acumulada debe llevarnos a afrontar esta, podemos considerar última etapa, con los objetivos claros y definidos; siendo conscientes de la oportunidad que se nos presenta con el Fondo de Transición Justa, que, para nosotros, sin ninguna duda, es el futuro industrial de Asturias.